Vivir este ritual nos invita a honrar lo sagrado de nuestro cuerpo y los caminos recorridos por nuestros pies hasta ahora, para que podamos recibir una nueva narrativa en nuestra piel con el corazón abierto. El tatuaje permite la regeneración a través del arte.
La palabra LUNAWÍ es un aspecto simbólico que significa “el encuentro de la Luna con el Sol”. Fue a partir de esta percepción que nació el trabajo con Tatuajes a Mano Alzada y Arte Simbólico. La gran inspiración para el proyecto proviene de mi búsqueda constante de reconexión con la naturaleza, tanto exterior como interior.
El rito liderado y anclado por Rafa es la expresión de un cruce, desde el lugar donde estábamos hasta el lugar por el que viajaremos a continuación. Un rito como puente, un camino. Su dulzor firme nos permite penetrar zonas de la piel de forma ligera pero profunda. ¡Honro enormemente su servicio y su gran valentía de apoyo!
Rafa tiene una relación ancestral y sagrada con el arte corporal y cada encuentro con ella está lleno de emociones y sentimientos dignos de un hermoso rito de iniciación. Además de un gran tatuador, Rafa es un auténtico terapeuta de arte corporal, dando vida a nuestras historias a través de símbolos sagrados.
Realizar un rito con Rafa es abrirse a permitir que los códigos ya presentes en el cuerpo se materialicen, trayendo toda su fuerza y virtudes a esta dimensión. Rafa tiene ese don de ver en la piel las formas que ya estaban allí, y que a través de los tatuajes pueden expresarse vívidamente en el cuerpo.
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